02 mayo 2011

Es necesario terminar con las desigualdades y la deserción

NO TODAS LAS ESCUELAS GOZAN DE LOS MISMOS RECURSOS EDILICIOS Y HUMANOS; PLANES PARA UNIVERSALIZAR EL PREESCOLAR Y LA DOBLE JORNADA; LAS ESTRATEGIAS OFICIALES

Sábado 20 de mayo de 2006 | Publicado en edición impresa



http://www.lanacion.com.ar/807385-es-necesario-terminar-con-las-desigualdades-y-la-desercionSegún el Foro mundial de seguimiento de los objetivos de la Educación para todos, la Argentina ocupa el primer lugar entre los países de América latina, y el puesto 23 entre los primeros 41 países que cumplieron con las metas establecidas por la Unesco en 2000.
"Son niños expulsados del tiempo de la niñez, de un tiempo de infancia que requeriría ser asegurado y garantizado por los adultos. Excluidos, pugnan por ser incluidos, reconocidos y nominados. De diferentes modos se vinculan y significan a la escuela y a sus maestros como un espacio privilegiado socialmente por ellos", señala Patricia Redondo en su libro Escuelas y pobreza. Entre el desasosiego y la obstinación .Pobreza, marginalidad, hambre, dolor, frío, violencia, drogas. Todas estas realidades se entremezclan hoy con la niñez en nuestro país y afectan directamente sus posibilidades educativas.
Los parámetros utilizados incluyen la universalización de la enseñanza primaria, la alfabetización de adultos, la tasa de deserción hasta quinto grado de la primaria y la paridad entre los sexos.
Sin embargo, en los hechos, cerca de 200.000 chicos de 6 a 14 años no asisten a la escuela. Y de los que sí van, muchos lo hacen en condiciones precarias: aulas en contenedores, sin luz y agua, con una infraestructura pobre, con un docente por establecimiento o con un calendario escolar acotado. Todo esto, indefectiblemente, impacta en la calidad educativa.
Es en todas estas situaciones donde el derecho a la educación parecería estar olvidado. Donde se les quita a los niños la posibilidad de desarrollar sus habilidades intelectuales, de reflexión y socialización.
"No ir hoy a la escuela es no participar prácticamente del último reducto emancipador que, especialmente en los medios populares, les queda a los niños para integrarse y socializarse, y así aspirar a una ciudadanía plena", sostiene Eloy Mealla, responsable de Promoción y Proyectos de Fe y Alegría Argentina.
Si bien la ley de protección integral de la niñez, recientemente reglamentada, refirma en su artículo 15 el derecho a la educación pública y gratuita de las niñas, niños y adolescentes, lo cierto es que este derecho no está garantizado para el total de la población.
Consecuencia moral
"La exclusión del sistema educativo tiene antes que nada una consecuencia moral: convivir en una comunidad en la que miles quedan afuera por haber nacido en un hogar pobre supone no respetar los derechos humanos y cuestiona las bases mismas de la democracia", sentencia Mariano Narodowski, director del Area de Educación de la Universidad Torcuato Di Tella. Esto quiere decir que las probabilidades de caer en la pobreza se multiplican en niños que no culminaron su ciclo educativo.
Para intentar paliar esta situación, el gobierno impulsó la ley de financiamiento educativo, que tiene metas auspiciosas y plantea ir aumentando, progresivamente, el presupuesto destinado a la educación (6% del PBI en 2010), e ir reduciendo las brechas educativas.
Si bien se ha generado mucha expectativa en función de la norma, algunos son escépticos respecto de los resultados concretos que puedan concretarse, especialmente en la aplicación en las provincias.
"La ley no aporta nada nuevo. Como en otras épocas de la Argentina, en las que el país crece, los políticos gastan más en educación. Cuando la Argentina crezca menos o deje de crecer seguramente los mismos políticos harán lo mismo que en el pasado: ajustar", dice Narodowski, defensor de un salario universal mínimo vital para las familias con niños.
Entre los compromisos asumidos por la ley para 2010 se encuentra el de incluir en el nivel inicial al 100% de la población de 5 años, y asegurar la incorporación creciente de los niños y niñas de 3 y 4 años. Según datos del Indec de 2001, aún quedan fuera del sistema 974.027 chicos de estas edades.
Uno de los factores que inciden fuertemente en la desigualdad educativa es la extensión de la jornada escolar.
La ley plantea lograr que, como mínimo, el 30% de los alumnos de educación básica tengan acceso a escuelas de jornada extendida o completa. Las cifras de la Dirección Nacional de Información y Evaluación de la Calidad Educativa indican que sólo el 5% de la matrícula del nivel EGB corresponde a escuelas de jornada completa en el nivel nacional, demostrando que queda mucho camino por recorrer.
Por su parte, Juan J. Llach, en su trabajo Escuelas ricas para los pobres , plantea la terrible desigualdad de oportunidades marcada por el sistema educativo vigente y sostiene que las escuelas a las que asisten los chicos pobres son también las más pobres.
"Pudimos comprobar fehacientemente, mediante modelos estadísticos, que existe una ignominiosa discriminación dentro del sistema educativo argentino, que con seguridad no es de ahora. El caso del Gran Buenos Aires es abrumador. Por ejemplo, el capital físico en las escuelas estatales de Vicente López es casi 50% mayor que en José C. Paz; el capital humano en las escuelas de Avellaneda es 20% más alto que en las de Moreno, y el capital social de las escuelas de Lanús es 20% superior al de las escuelas de San Martín", afirma el documento.
Para solucionar este problema propone aumentar la autonomía de las escuelas, universalizar la preescolaridad, implantar la doble escolaridad y morigerar la segregación social del sistema educativo.
Políticas públicas
Las estrategias gubernamentales para retener a los alumnos no siempre logran su cometido, y muchas veces la escuela y el sector social quedan a cargo de este desafío.
Una de las acciones planteadas por el gobierno es el Programa Nacional de Inclusión Educativa "Todos a estudiar". Desde este año, crea una nueva línea de trabajo llamada "Volver a la Escuela", dirigida a niños en edad de cursar la educación obligatoria.
La beca consiste en 400 pesos anuales para todos los niños del país de 6 a 14 años que no hayan terminado su escolaridad en 2005 o que nunca hayan ingresado. Esta iniciativa es acompañada por Unicef, la Fundación de Organización Comunitaria (FOC) y la Fundación SES.
Micaela Urdinez
Campaña del Sector Social
En nuestro país, la educación es una de las prioridades del sector social, ya que unas 3300 entidades están dedicadas a este tema, según datos del Centro Nacional de Organizaciones de la Comunidad (Cenoc).
Un ejemplo de las acciones que realiza este sector es la Campaña Argentina por el Derecho a la Educación "Por una nueva igualdad", recientemente lanzada, que se enmarca dentro de la Campaña Mundial por la Educación.
En nuestro país está apoyada por un grupo de entidades integrado por Cippec, Fe y Alegría, Fundación Ses, Flacso, Fundación Escolares y Laboratorio de Políticas Públicas, que promueven la educación como un derecho humano básico y buscan incidir en el rumbo de las políticas públicas en materia educativa, desarrollando estrategias regionales.

1 comentario:

Magali Bolotin dijo...

A través de este artículo les presentamos el panorama de la sociedad que no sólo se extiende ante nuestros ojos, sino de la cual somos parte integrante.
Este es el panorama con que se encontró el grupo de jóvenes que germinó la semilla de EYC.
Este es el panorama que hoy enfrentamos, contra el que hoy luchamos, para el cual creamos políticas para dejar de ser meros ciudadanos pasivos, y en vez activar para cambiar una realidad altamente desigual.